jueves, 17 de enero de 2013

PUEDES CONSEGUIR TODO LO QUE TE PROPONGAS (O NO)

El otro día leí que entre la palabra querer y conseguir está la palabra esfuerzo.
El otro día reflexioné sobre el ya tópico de nuestra sociedad "Puedes conseguir todo lo que te propongas" que viene a ser el eslogan, el carpe diem, el latinajo en español del siglo XXI.
Lo cierto es que es así, lo veamos como lo veamos, nos inculcan la superación personal por todas las vías posibles. No paran de acribillarnos con el más que común, más que sobrevalorado (como uno mismo y las sus capacidades, a veces) "puedes conseguir todo lo que te propongas" ¿Pero y que pasa si no? ¿Y que pasa si no puedes?
Quizá no sea mas que un absurdo cuento infantil. Quizá no sean sólo tres palabras. Querer, esforzarse, conseguir (o no) Quizá sean tres palabras precedentes de un interminable círculo vicioso en el que, después del fracaso, tan sólo nos queda el seguir queriendo, el seguir esforzándose  y en el más desdichado de los casos, el seguir fracasando.
 Por que no hay nada peor que equivocarse una vez, sino hacerlo dos veces, sino hacerlo cada interminable rato.

lunes, 7 de enero de 2013

La única palabra que sólo es una palabra.

"Dios" es la única palabra que sólo es eso, una palabra.

Quiero escribir

Quiero escribir. Me dije mientras pensaba en ello, mientras me visualizaba haciéndolo, confeccionando los párrafos más excepcionales que jamás hubiera creado.
Quiero escribir. Para que seguir negándolo. El quiero crear convirtió hace tiempo en  una pueril excusa, una estúpida forma de simplificarlo, reducirlo a arte. Que banalidad. Allá donde quede el arte quedarán mis talentos, esos que dicen que son innatos, esos que nunca tuve.
Mentira cochina el don y la habilidad preestablecida.